Lo inimaginable pasó, y a pesar
de que muchos se nieguen a admitirlo, Trump ha hecho historia en el mundo de
las relaciones diplomáticas, al reunirse con el líder norcoreano Kim Jong-un,
esto es sin lugar dudas, algo que marca de manera muy particular la presidencia
de Trump, no obstante ¿Cuál es el verdadero interés detrás de esta reunión?
En agosto de 2017, el hecho que
se diera un encuentro entre estos dos gobernantes era muy poco probable,
tomando en cuenta la guerra de insultos que ambos se dieron, donde uno le decía
“viejo chocho” al otro, y este respondía que ese era un “enano y gordo”, lo
cual dejaba mucho que desear acerca de dos mandatarios, eso sin contar claro,
cuando se dio la medición de fuerza sobre quien tenía “el botón rojo” mas
grande para hacer destruir al otro.
Durante el encuentro que tuvo
lugar en Singapur (junio de 2018), ambos firmaron un convenio donde Corea del
Norte se compromete a la desnuclearización de la península, mientras Estados
Unidos se compromete a detener los ejercicios militares en conjunto con Corea del
Sur, así como garantizar la seguridad del país (Corea del Norte). No es la
primera que Corea del Norte se compromete a abandonar su programa nuclear, en
el pasado otros convenios han sido firmados, sim embargo, nunca cumplidos. En
esta ocasión, tampoco queda muy claro como ha de ser “comprobado” que dicha desnuclearización
se ha llevado a cabo.
Personalmente, lo que mas me
llama la atención es el contexto mundial que se esta viviendo donde se da esta reunión,
justo después de la cumbre del G7 en Canadá, donde Trump fue duramente
criticado por sus aliados tradicionales, al imponer aranceles a las importaciones
de acero y aluminio hacia Estados Unidos, los cuales han sido tildados como “absurdos”.
Aparte de esto, Estados Unidos planteó la idea que Rusia fuese admitida de
nuevo en el grupo (Rusia fue expulsada en el 2014 debido al conflicto en Crimea),
la cual fue rechazada de manera unánime por los países europeos. Esto nos lleva a pensar que Estados Unidos
percibe a países como Alemania, Canadá, Francia, Reino Unido, etc. como aliados
menores, mientras busca la manera de formar una especie de triple alianza con
Rusia y China.
La historia nos enseña que, en
varias ocasiones, Estados Unidos ha tenido que acudir al rescate de sus aliados,
quizás por eso Trump percibe que no hay muchos beneficios en la alianza con la Unión
Europea, Reino Unido, Canadá y otros países, y va en busca de formar alianza
con países poderosos militar y económicamente, le está apostando al “caballo
ganador” por lo que puedo percibir.
En ese sentido, situaciones como
la crisis en Nicaragua, el enfriamiento de las relaciones con Cuba y la crisis
en Venezuela, no son para nada importantes en la agenda diplomática de Trump,
pues estos temas no representan un peligro inminente para Estados Unidos, como
si lo representa, el tener enemigos como: China, Rusia y Corea del Norte.
En conclusión, veo que tanto
Trump como Kim Jong-un se dieron cuenta que la paz es mejor que la guerra, la
cual solo trae miseria y desasosiego, mientras que una alianza comercial y el
eventual establecimiento de relaciones diplomáticas, así como el intercambio de
información, traería muchos beneficios para ambos países, tanto políticos como económicos.
